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64    El “silencio comunicativo” en contextos interculturales/Valtierra-Zamudio/61-75






                (2014) expone que la pragmática (lingüística) ha   descifran o se infieren cuando existe un conocimiento
                sido esencial para resolverlo, además de la teoría de   del contexto, de la cosmovisión y de la cultura del que
                los actos de habla, que se concentra en analizar las   los emite (Valtierra, 2013).
                acciones lingüísticas;  es decir, a través de los tres   El trabajo de los Scollon acerca de la comunicación
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                momentos coexistentes y correlativos de los actos   intercultural, en  especial de  la  comunicación
                de habla –locutivo, ilocutivo y perlocutivo– que son   interétnica  y  del  interdiscurso,  alude  a  estos
                la base de la comunicación verbal.  Cuando la fuerza   aspectos ilocutivos no verbales. Sin embargo, el
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                del acto locutivo causa un efecto, quiere decir que   problema que prevalece en estos escenarios es que
                ha cumplido con ciertas condiciones para lograr   se analizan desde una óptica monocultural. Por ello,
                ese efecto deseado. A esto se le denomina fuerza   John Haviland busca romper con estas lógicas a partir
                ilocutiva (Habermas, 2014; Searle, 1969). 8    de  su experiencia con  los tsotsiles  de Zinacantán
                   En un acto de habla también hay reglas que se   a través de las máximas mínimas, que difieren de
                observan, como las formas de conducta y principios   aquellas  dadas  en  contextos  no  indígenas,  como
                conversacionales que conforman las denominadas   en el caso de México entre quienes hablan español
                máximas cooperativas (Grice, 1975)  o los principios   (Haviland, 1988). Sin embargo, estas máximas no
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                de cortesía (Leech, 1983). Así, un acto de habla no se   resuelven del todo el problema de la interculturalidad
                logra si el interlocutor no aplica estos principios y si no   o de la interacción en entornos interculturales.
                existe un proceso de inferencia, lo que puede ocurrir   Una alternativa a las máximas mínimas es la de
                por no comprender aspectos o rasgos culturales,   localizar máximas interculturales. En un escenario
                lingüísticos,  sociales,  contextuales,  de  cosmovisión,   como el de una comunidad indígena que se relaciona
                entre otros. Si no se establece de manera “adecuada”   con mestizos de un medio urbano, un misionero católico
                ni se formula una forma “correcta” de preguntar, pedir   puede ser ejemplo interesante al respecto.   Una
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                o afirmar, la fluidez de la conversación se perturba.   investigación de este tipo, es decir, en un medio
                A  esto  se  agregan  otros  elementos  comunicativos   conformado por tojolabales y misioneros  católicos
                no verbales como la gestualidad, la proxémica,   que interactúan y se comunican, hay elementos
                expresiones y movimientos del cuerpo, pausas en   fundamentales para comprender mecanismos como el
                la  conversación,  back channels  con  su  función  de   silencio, que además funge a manera de herramienta
                aquiescencia, titubeos y el silencio. Todos estos   o vía de análisis para identificar aquellos aspectos
                elementos tienen fuerza ilocutiva, pero sólo se   contextuales y culturales  que obstaculizan la



                6  Dice Habermas respecto de lo que denomina pretensiones de validez, que son la verdad, la rectitud y la veracidad, que “una teoría de la comunicación
                elaborada en términos de pragmática formal […] podrá utilizarse para una sociología de la acción si se logra mostrar de qué forma los actos comunicativos,
                es decir, los actos de habla, o las manifestaciones no verbales equivalentes, cumplen la función de coordinar la acción contribuyendo así a la estructuración
                de las interacciones” (Habermas, 2014, p. 323). Complementa diciendo que “la acción comunicativa depende de contextos situacionales que a su vez son
                fragmentos del mundo de la vida de los participantes en la interacción” (Habermas, 2014, pp. 323-324).
                7  Los actos de habla se basan en el principio wittgensteiniano de los juegos de lenguaje, es decir, lo que el lenguaje está haciendo como apostar, admitir,
                prometer o agradecer (Austin, 1990). Lo anterior significa que si una persona dice algo (acto locutivo) de una forma determinada y con una intención,
                causa un efecto en otro individuo (fuerza perlocutiva).
                8   Por poner un ejemplo de lo anterior, decir “perdón” conlleva una enunciación, un mensaje y un metamensaje que puede ser descifrado por el interlocutor,
                además de una reacción o respuesta de éste. Por lo tanto, aquí se observa un acto de habla y su fuerza ilocutiva.
                9  Cuando se mencionan las máximas cooperativas de Grice, se refiere a máximas conversacionales que consisten en cumplir con “tu contribución
                conversacional tal como es requerida, en el escenario en el que ésta ocurre, por la propuesta aceptada o la dirección del intercambio de habla en el que
                estás involucrado” (Grice, 1975, p. 45). Estas máximas se dividen en cantidad, calidad, relación y manera.
                10  La identificación de máximas conversacionales en contextos interculturales, como entre misioneros y tojolabales, va más allá de pensar en los actos
                de habla. De hecho, demanda un proceso de inmersión y de conocer/aprender códigos y dinámicas propios de la comunidad, así como su cosmovisión. El
                lingüista Charles Briggs logró resultados importantes después de siete años de estancia entre los habitantes del pueblo “mexicano” en Nuevo México,
                pues para comprender sus dinámicas socioculturales y sociolingüísticas debió vivir entre ellos, aprender más que la lengua o hacer preguntas para recibir
                respuestas (Briggs, 2003).



                                                  Tequio, enero-abril 2020, vol. 3, no. 8
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