Page 12 - Ra Rió Guendaruyubi 7
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septiembre - diciembre - 2019 / 3(7)
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En este estudio realizado con jóvenes de preparatoria de la
UABJO (Bernardino, 2015) fue evidente que no todos son adictos a
los videojuegos y que el tiempo que dedican a ello es muy variable,
dependiendo de las circunstancias y la edad. El tema de la frecuencia
y el lapso que los muchachos destinan a videojugar representa un
problema para madres, padres, maestros y maestras. En caso de que
seas videojugador, seguramente sabes de qué te hablo.
Cabe reiterar que realicé las entrevistas en una de las preparatorias
de la UABJO. A modo de resumen, en el estudio encontré algunos
gamers, aunque eran pocos en comparación con la mayoría de
los jóvenes que sólo tuvieron un acercamiento a los videojuegos
y rápidamente los abandonaron. Veamos qué nos cuentan de su
experiencia, a continuación te presento las diferentes razones que
tuvieron algunos jóvenes (de 14 a 19 años) para disminuir el tiempo
a esta diversión.
Para los gamers, el uso de videojuegos es una práctica cotidiana
de ocio que les proporciona emoción, diversión, relajación, también
les impone retos que deben superar y desarrollan su creatividad
(Bernardino-Hernández, 2015). Los efectos positivos en la salud, la
mayor facilidad para sociabilizar y la formación personal por el uso
de videojuegos han sido documentados en otros estudios (Sue,
1992). En este artículo sólo veremos la experiencia de aquellos que
abandonaron los videojuegos.
“Una hora o una hora y media, porque luego me aburre…”
Los videojuegos ofrecen buenos momentos de entretenimiento,
emoción y diversión, pero como cualquier juego, deja de ser
placentero y llega a ser aburrido: “Cada tres días, tres veces a la
semana. Una hora o una hora y media, porque luego me aburre”
(Paco). “Unas tres horas no’más y ya, los sábados, o en la tarde,
porque también luego me enfado” (Santiago). “Es no’más de lograr
una misión y de ahí lo apago y me voy a hacer otra cosa, es que luego
ya lo sentía aburrido” (Sebastián).
Experiencias
juveniles en
el uso de
videojuegos
Bernardino-Hernández