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septiembre - diciembre - 2019 / 3(7)
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En las escuelas dicho tema está vetado y cuando se toca, se hace
desde una perspectiva biológica. No es de sorprender que en el hogar
tampoco se hable del asunto, debido a las creencias religiosas o a los
prejuicios e ideas equivocadas.
Estas creencias o mitos pueden causar malas experiencias en tu vida
sexual, como le ha sucedido a muchos/as jóvenes y adolescentes en
bachilleratos y secundarias que he visitado, de ahí la importancia de
conocerlos y aclararlos.
La primera vez y sus consecuencias
Uno de los mitos es si la primera relación sexual trae
cambios físicos visibles en el cuerpo. En los talleres,
los/las jóvenes han expresado su preocupación
por el hecho de que sus padres y madres puedan
detectar a simple vista que han iniciado su vida
sexual.
Al respecto, el GEISHAD (s.f.) nos dice que no
hay forma de saber visualmente si una persona ya
ha tenido o no su primera relación sexual, ni mucho
menos el número de veces, por lo que este mito no
debe causar pánico; sin embargo, es importante que
tomes con cuidado y responsabilidad el inicio de tu
vida sexual, por eso sugiero que antes te informes
sobre el uso de preservativos o de anticonceptivos,
para evitar un embarazo a temprana edad o contraer
una enfermedad de transmisión sexual.
De igual manera, debes recordar que si bien se
trata de una decisión personal, también es necesaria la disposición de
la pareja, por lo que no debe existir algún tipo de presión hacia ti o hacia
el otro o la otra; nadie tiene derecho a tomar esa decisión por ti y no
tienes que cumplir con las expectativas de los demás.
Jóvenes y
sexualidad
Reyes-García